Una infancia ligada a la naturaleza
Anna-Lisa Christiane nació en Wellington, Nueva Zelanda, el 18 de noviembre de 1994. Creció en una granja en el campo de Nueva Zelanda, donde se crió con sus padres y dos hermanos. Desde pequeña, Christiane se sintió conectada a la naturaleza y se interesó por el medio ambiente.
“Me encantaba pasar tiempo al aire libre”, dijo Christiane en una entrevista. “Siempre estaba jugando en el bosque o en el río. Me encantaba aprender sobre las plantas y los animales”.
Una corona para impulsar su activismo
En 2015, Christiane fue coronada como Miss Earth New Zealand. Este título le dio una plataforma para hablar sobre el cambio climático y otros problemas ambientales.
“Fue una oportunidad increíble”, dijo Christiane. “Me dio la oportunidad de compartir mi mensaje con una audiencia más amplia”.
Miss Earth 2015
Christiane representó a Nueva Zelanda en Miss Earth 2015, que se celebró en Manila, Filipinas. No logró clasificarse para la final, pero aprovechó la oportunidad para hablar sobre el cambio climático y otras preocupaciones ambientales.
“Fue una experiencia increíble”, dijo Christiane. “Tuve la oportunidad de conocer a personas de todo el mundo y aprender sobre sus problemas ambientales”.
Una carrera como modelo
Después de su reinado como Miss Earth New Zealand, Christiane se convirtió en modelo profesional. Ha trabajado para marcas como Fashion Nova, Guess y Maybelline.
“Siempre me ha gustado la moda”, dijo Christiane. “Es una forma de expresarme”.
Una activista comprometida
Christiane es embajadora de la Fundación Miss Earth y trabaja para promover la conciencia sobre el cambio climático. También ha participado en numerosas campañas ambientales, como la limpieza de playas y la reforestación.
“Estoy comprometida a hacer mi parte para ayudar al medio ambiente”, dijo Christiane. “Creo que todos tenemos un papel que desempeñar”.
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Una mujer de éxito
Anna-Lisa Christiane es una mujer de éxito que ha logrado combinar una exitosa carrera como modelo con su activismo ambiental. Es un ejemplo de cómo la belleza y la inteligencia pueden utilizarse para promover causas nobles.
“Estoy muy agradecida por las oportunidades que he tenido”, dijo Christiane. “Espero poder seguir inspirando a otros a hacer del mundo un lugar mejor”.
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