En Ciudad Madero, Tamaulipas, una tragedia sacudió a la comunidad el domingo 1 de octubre cuando el techo de la Iglesia de la Santa Cruz colapsó durante una misa en curso. El incidente dejó un saldo devastador de 9 personas fallecidas y al menos 40 heridas, según las autoridades del estado de Tamaulipas.
El Trágico Accidente
La Vocería de Seguridad del estado confirmó el colapso, que ocurrió en medio de una misa que se llevaba a cabo en la Iglesia de la Santa Cruz. La magnitud del desastre ha conmocionado a la comunidad local y ha movilizado a equipos de rescate de diversas agencias.
Rescate en Curso
Hasta el momento, las autoridades no han podido determinar el número total de personas heridas debido a la confusión y el caos que se generó en el lugar. Sin embargo, hasta las 16:30 horas del mismo día, se habían registrado tres víctimas mortales y dos mujeres heridas, quienes fueron trasladadas al Hospital General “Dr. Carlos Canseco” de Tampico para recibir atención médica.
El alcalde municipal de Ciudad Madero, Adrián Oseguera, instó a los residentes de la colonia Unidad Nacional a mantenerse alejados de la zona del desastre para permitir que los equipos de rescate realicen su trabajo en busca de sobrevivientes.
Esfuerzos de Rescate Conjuntos
La respuesta ante esta tragedia ha sido inmediata y coordinada. En el lugar del colapso, se encuentran trabajando siete unidades de la Guardia Nacional, unidades de la Guardia Estatal, dos equipos de Protección Civil y siete unidades de la Cruz Roja, además de contar con el apoyo de los bomberos, ambulancias particulares, Protección Civil, Bomberos de PEMEX y dos grúas, todo en el marco del plan DN-III activado.
La vocería informó que también están llegando unidades de diferentes corporaciones y civiles voluntarios con suministros y herramientas para ayudar en las labores de rescate.
Solidaridad y Búsqueda de Sobrevivientes
A través de una transmisión en vivo en la página de Facebook “Reporteros en la zona de Tampico”, se puede apreciar el arduo trabajo de los equipos de emergencia y voluntarios, quienes están comprometidos en la búsqueda de personas atrapadas entre los escombros.
En medio del caos y la angustia, numerosos habitantes se han acercado al lugar del colapso en busca de sus seres queridos. Han solicitado con urgencia el envío de recursos esenciales como agua, suero, sábanas, colchonetas, polines y serruchos para apoyar las labores de rescate. Al mismo tiempo, los servicios médicos se preparan para atender y trasladar a los heridos a centros de atención médica.
Conclusión
La tragedia en la Iglesia de la Santa Cruz en Ciudad Madero, Tamaulipas, ha dejado una marca indeleble en la comunidad. A medida que los equipos de rescate continúan su labor incansable en busca de sobrevivientes, la solidaridad y el apoyo de la sociedad se hacen evidentes en este momento de profunda tristeza y necesidad.
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